La idea es que le des la misma importancia a tus compromisos financieros, como lo harías con una cita médica o la revisión mecánica de tu vehículo. 

2. Revisa tus tasas de interés

P: ¿Qué préstamo deberías pagar primero? R: El que tenga la tasa de interés más alta. 

P: ¿Qué tipo de cuenta de ahorros deberías abrir? R: La que te ofrezca la mejor tasa de interés.

P: ¿Por qué las tarjetas de crédito nos causan tanto dolor de cabeza? R: Porque se financian con un interés compuesto.

Estar atento a tus tasas de interés, te ayudará a tomar una mejor decisión financiera de acuerdo a tus necesidades: pagar una deuda o iniciar un ahorro.

3. Vigila tu patrimonio neto 

Tu patrimonio neto - la diferencia entre tus activos y pasivos - es la cifra más indicada para hacer un diagnóstico de tu situación financiera actual. Al vigilar tu patrimonio neto identificas qué tanto estás avanzado o retrocediendo respecto a tus metas financieras.

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4. Haz tu presupuesto mensual

Este es el punto de partida para alcanzar tus metas. Descarga gratis nuestra plantilla para elaborar presupuesto y organizar tus finanzas. 

5. Haz la dieta del efectivo

Si estás gastando demasiado, esta dieta será de gran ayuda para ti. Haz lo siguiente: identifica cuántas veces vas al cajero en el mes y cuánto dinero retiras de tu cuenta en cada transacción. Luego, define un tope máximo de efectivo que gastarás al mes, y asegúrate de no superar ese límite cuando visites el cajero nuevamente. La idea es que seas consiente de la cantidad de efectivo que manejas mensualmente, y que a veces, no te das ni cuenta a dónde va a parar.