Miércoles, 13 Marzo 2024 20:57

Desafíos de El Salvador ante el cambio climático

Escrito por Karla Gutiérrez

En el estudio titulado El Salvador: panorama de oportunidades, elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señala que, el cambio climático ha tenido un fuerte impacto en la región en la reducción de la productividad de los principales cultivos como el maíz 13%, arroz y frijol 11%, respectivamente.

Las plantaciones de sorgo con una baja del 14% y la caña de azúcar con un 36%, han sido las más impactadas.

Según el informe del BID, a nivel mundial, El Salvador se ubica en el puesto 28 entre los países más expuestos por el cambio climático, que afecta principalmente la infraestructura y la agricultura.

Lo que le ha costado al país US$2.200 millones en los últimos 30 años, lo que representa el 7.2% del producto interno bruto que tendrían a partir de 2030 los eventos climáticos si no se toman medidas ambiciosas e inmediatas

Los fenómenos climáticos extremos (principalmente hidrometeorológicos) afectan la infraestructura y la agricultura. Es urgente avanzar en políticas que aumenten la resiliencia del país, así como en el desarrollo de prácticas agrícolas que mitiguen la vulnerabilidad ante sequías e inundaciones, reza el estudio.

Ejes de intervención

El BID considera cruciales estos puntos para transformar al país en una economía moderna, inclusiva, sostenible y con más potencial turístico.

1.- Promoción del talento humano
Urge más y mejor oferta educativa y de capacitación laboral, con el fin de abrirle puertas a la población, especialmente a jóvenes y mujeres que siguen sin empleo o que se han visto obligados a migrar. Asimismo, es primordial brindar servicios de salud oportunos y fortalecer los mecanismos de protección social para las poblaciones vulnerables.

2.- Respaldo a empresas competitivas
El Salvador debe habilitar las condiciones necesarias para potenciar el ambiente de negocios y las inversiones. Esto exige cerrar brechas en infraestructura productiva y en conectividad digital. También es indispensable avanzar en términos de resiliencia, gestión de riesgos y conservación del medio ambiente, administrando con eficiencia los recursos naturales, especialmente el recurso hídrico, dado que es altamente vulnerable a desastres naturales.

3.- Consolidación de instituciones eficaces
Se requieren entidades capaces de gestionar unas finanzas públicas sólidas, sanas y transparentes, apoyándose en un profundo proceso de digitalización y en la generación de mayor espacio fiscal para continuar impulsando el crecimiento y el bienestar. Para esto es determinante el gobierno abierto y la participación ciudadana, de manera que las políticas públicas sean producto de un diálogo permanente.