Rosa Vilma Rodríguez de la Peña, es mujer, madre, esposa, y profesional salvadoreña con más de veinticinco años de experiencia en el desarrollo sostenible y el sector empresarial. Desde sus inicios, ha enfrentado retos como romper esquemas en un entorno masculinizado, marcando límites con respeto y firmeza. Su inspiración proviene de sus padres, especialmente de su madre, quien mostró una gran visión empresarial; y de su padre, médico de profesión, de quien heredó la sensibilidad social y visión de servicio.

La industria del agro en El Salvador ha estado mayormente formada por hombres, no obstante, la llegada de Rosa Vilma Rodríguez como Directora Ejecutiva de la Fundación del Azúcar (FUNDAZUCAR), la posicionó como líder en una agroindustria masculinizada, lo cual ha roto esquemas patriarcales y ha abierto una nueva ventana a las mujeres en la agroindustria azucarera salvadoreña.

El Día Internacional de la Mujer para Rosa Vilma es una oportunidad para conmemorar a todas las mujeres que han luchado por sus derechos, mujeres que fueron capaces de hacer visible lo invisible: derechos políticos, étnicos, sociales, culturales y económicos; recordando su valentía y determinación a lo largo de la historia. Destaca la importancia de las mujeres pioneras por la igualdad en el ejercicio de los derechos, sin embargo, menciona que “… queda un camino largo por recorrer ya que aún hay en el mundo millones de mujeres en situación de desigualdad y vulneración de sus derechos,lo que dá sentido a conmemorar el Día internacional de la mujer, recordando esta situación y promoviendo que se trabaje en pro de las mujeres y sus derechos”.

En su trayectoria empresarial, Rosa Vilma ha afrontado desafíos como demostrar su valía como mujer, así como promover la inclusión de mujeres en áreas de trabajo tradicionalmente ocupadas por hombres. Ha superado retos importantes y estructurales como romper esquemas y cambios culturales en el sector azucarero, liderando con convicción y respeto.

Rosa Vilma señala que la agroindustria azucarera tiene un compromiso con la equidad de género, ya que actualmente la principal herramientaque se utiliza para sensibilizar a la cadena de valor del sector azucarero es el Manual de Buenas Prácticas Agrícolas para el cultivo de caña de azúcar, el cual incluye la equidad de género; esto implica para el sector azucarero la creación de metodología, material informativo y material didáctico destinado a una población culturalmente masculinizada. “…estamos dando un primer paso para marcar historia en nuestro agro, al incorporar la equidad de género en la gestión agrícola, involucrando al público interno del sector y la cadena de valor, así como las comunidades.

Estos son logros que poco a poco están transformando el país y su economía”, destaca Rosa Vilma Rossy Rodríguez, como es conocida, reconoce el papel crucial de las mujeres líderes en transformar el mundo empresarial salvadoreño hacia la inclusión, la innovación y la responsabilidad social; y finaliza con una cita de Mary Wollstonecraft considerada la primera mujer feminista de la historia, que dijo en 1759: “No deseo que las mujeres tengan poder sobre los hombres sino sobre ellas mismas”, por ello recomienda a las futuras generaciones de mujeres creer en sí mismas, reconocer sus habilidades, formarse, encontrar el equilibrio entre la vida personal y profesional, así como visualizar el éxito.

Rosa Vilma concluye con estas palabra, “es necesario cerrar las brechas y lograr la igualdad entre mujeres y hombres, transitando hacia una nueva cultura con una mayor participación de mujeres en la cadena de valor del sector azucarero de El Salvador, contribuyendo así a una agricultura sostenible”.