1. Elija el mejor momento para su viaje

Aunque pueda parecer una locura y evidentemente, en los meses de verano siempre es más caro viajar, se pueden encontrar opciones baratas durante todo el año. Conozca su destino, piense cuándo es allí temporada alta o en qué momento, por sus condiciones climáticas, estará menos demandado por los viajeros.

2. Tal vez la mejor opción no sea volar: Si es un viajero habitual, sabrá que una buena parte de su presupuesto se va, habitualmente, en vuelos. Quizá esta ocasión, en la que busca vacaciones baratas, sea el momento de disfrutar de la belleza de zonas cercanas a las que se pueda llegar en unas pocas horas de coche.

3. Utilice plataformas de viajes colaborativos: ¿Le parece una locura dormir gratis en la casa de alguien que no conoce? Existen plataformas en las que anfitriones ofrecen un sofá de su casa o una habitación de sobra por el mero hecho de conocer gente y obtener experiencias de intercambio cultural. Es una forma de ahorrar hotel y probar algo que no es habitual. Se llama coachsurfing y está esperándote.

4. Vacaciones todo incluido: Quizá no sea lo ideal, pero optar por un viaje a régimen completo hará que sepas desde el principio lo que vas a gastar. Además, no tener que buscar restaurantes para comer y cenar le evitará sustos desagradables.

5. Bonos de transporte y visitas: Para hacer unas vacaciones baratas es preciso informarse bien de los bonos de transporte público del destino. Además, algunas ciudades, presentan tarjetas de turistas que por un precio mucho más económico ofertan paquetes para visitar varios museos o galerías. Todo es cuestión de coordinarse con antelación.

6. ¡Cuidado con el Internet!

Con esto del roaming, a muchas personas les ha pasado que no han desconectado los datos móviles fuera del área pensando que no les sumaría gastos. ¡Se han encontrado con facturas absolutamente inasumibles! Piense en su destino y, si tienes dudas, mejor una llamada a la compañía telefónica para aclararlo todo.