Hacer presupuestos: Cada hogar, cada persona, tiene diferentes tipos de gastos al mes, como los fijos (cosas que hay que pagar obligatoriamente, como los servicios) y los variables (como salir con amigos los fines de semana).
No gaste por gastar: Con un presupuesto claro, lo siguiente es seguir la pista de los gastos variables: saber en qué usa su dinero día a día.
- Pequeños gastos: los que piensa que son insignificantes, pero en realidad son cosas en las que se le va la plata de a poco, como cafés, golosinas.
- Tendencias en sus gastos: tenga claro en qué momento del mes o la semana gasta más y evítelo, si no es necesario.
- Gastos emocionales: lo que compra cuando está triste, feliz o ansioso y que lo descuadran en su presupuesto.
Recicle, re use y comparta: Con los precios por las nubes, compartir puede ser una buena decisión. Y Nequi recomienda:
- Comparta suscripciones a servicios de 'streaming' o de almacenamiento en la nube.
- Si está en el gimnasio, pero no asiste regularmente, cámbielo por un parque y haga una rutina de ejercicios en casa o al aire libre.
- Si la ropa subió, entonces es hora de pensar en la moda circular, una tendencia que le permite comprar de segunda o modificar su ropa o intercambiarla con familiares o personas de confianza.
- Arme estrategias para ahorrar servicios públicos: evite los cargadores de dispositivos electrónicos conectados sin un propósito, deje bien cerrada la nevera, dúchese en menos tiempo y lave su ropa en procesos ecológicos de su lavadora o recicle el agua que esta usa.