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Al contrario de lo que solemos pensar, irse de vacaciones no significa necesariamente vaciar su cuenta bancaria. La mayoría de las veces, son errores pequeños y costosos que agotarán innecesariamente su presupuesto de vacaciones.

Las vacaciones ya están aquí. Tenemos la oportunidad perfecta para reconectar con nuestra familia y amigos a través de las actividades que más nos gustan. Con nuestros dispositivos tecnológicos podemos lograr más de lo que hacemos en lo rutinario y pueden convertirse en nuestros aliados para armar el entretenimiento en casa.

Tomar la decisión de tomar unas vacaciones es lo mejor que usted puede hacer cuando busca unos cuantos días para desconectarse de los deberes y las responsabilidades laborales o del hogar, pero antes de hacerlo es importante destinar un presupuesto para disfrutar sin ningún tipo de preocupación.

Trabajar y estudiar al mismo tiempo no es fácil, requiere de mucho esfuerzo; pero con organización, compromiso puede lograrlo.

1. Aprenda

Dedique unas horas a la semana para informarse y aprender sobre educación financiera. Quizá al inicio le parezca algo aburrido, pero hacerlo te permitirá manejar tus recursos económicos de forma más consciente, responsable y asertiva podría acceder.  

El pago de parqueos ya no será por hora o fracción, si no, por el tiempo que el usuario o permanezca en los establecimientos comerciales.

Los gastos innecesarios evitan que pueda hacer un ahorro fácil. Primero identifíquelos y luego elimínelos por completo de su vida.

La mujer, cada vez más, está jugando un papel fundamental en las decisiones financieras de lasfamilias gracias a sus cualidades en el manejo del dinero, el ahorro y los propósitos que suele hacerse a mediano o largo plazo.

El Instrumento de Financiamiento Rápido (IFR) proporcionará asistencia financiera rápida y de acceso limitado a países miembros que enfrentan una necesidad urgente de balanza de pagos, sin necesidad de que exista un programa propiamente dicho. Puede brindar respaldo para atender una gran variedad de necesidades urgentes, como las planteadas por shocks de precios de las materias primas, catástrofes naturales, situaciones de conflicto y posconflicto, y emergencias debidas a situaciones de fragilidad.

Usualmente en el crédito hipotecario se usa como garantía a la misma vivienda que se está financiando, u otra propiedad raíz. Es por ello que decimos que una vivienda está hipotecada cuando está siendo usada como garantía para el pago del crédito.