Esta iniciativa entra en vigor a partir de este día y se mantendrá por un período de 3 meses prorrogables, de acuerdo a las disposiciones del Gobierno.

Para el apoyo de esta iniciativa, el BFA ha destinado $3 millones, que son puestos a disposición de todas las personas que se dedican al rubo de la importación.

Dentro de los importadores que serán beneficiados se encuentran:  en el rubro de granos: arroz, frijol negro, frijol rojo, maíz amarillo, maíz blanco; en rubro de frutas y vegetales: cebolla, chile, papa, plátano, repollo, tomate y naranja. De igual forma, para todas estas labores agrícolas también se incluye la importación de fertilizantes.

Con el financiamiento especial, se favorecerá a clientes y no clientes del BFA, que sean importadores de productos en cualquiera de los rubros anteriores y que estén exentos del pago de aranceles, para que tengan una alternativa económica y continuar la productividad de cada sector.

Los importadores que accedan a este financiamiento tendrán una tasa de interés preferencial del 6.90%, con un plazo máximo de 3 años en condiciones favorables, recibiendo un alivio a su economía, en momentos que las crisis internacionales golpean en diversos sectores.

Impacto en la población

Con el financiamiento especial del BFA, a partir de US$25,000.00 los importadores podrán adquirir más de 64 mil libras de arroz (64,267 libras) o alrededor de 40 mil libras de frijol de seda (39,370 libras), con una tasa de interés preferencial, que servirá para que las familias salvadoreñas puedan adquirir los productos esenciales para su alimentación con un precio acorde a sus posibilidades.

Con esta inversión que realiza el BFA, se estarían beneficiando hasta 16 mil familias que podrán comprar arroz importado a buen precio y más de 3,300 familias que podrán comprar el frijol importado, adquirido con financiamiento del Banco de Fomento Agropecuario para paliar el impacto de la inflación mundial.

El BFA, contribuye con las medidas anunciadas por el gobierno para paliar los efectos de la crisis económica mundial a través del apoyo a todos los sectores del país, para garantizar la seguridad alimentaria, la capacidad productiva y el bienestar económico de la población.