Responden perfectamente a la nueva orientación del consumidor centrada en productos digitales a los que se accede "aquí y ahora", añaden la protección de manera casi automática en el mismo momento de venta y los consumidores los prefieren principalmente porque es fácil de entender qué cubren y el pago es casi instantáneo.
Diferentes formas de seguros integrados
Sin embargo, existen tres formas distintas de integrar la oferta de seguros en el proceso de venta: softflexible, predefinida o inclusiva. El principio básico no cambia: mantener el proceso comercial en web o app.
En la integración “flexible”, la oferta se presenta a los clientes en el punto de venta o en un punto relevante de su recorrido digital. A menudo, basta con marcar una casilla para optar por contratar la cobertura.
Por su parte, en la integración “predefinida”, más agresiva, el seguro se añade automáticamente en el proceso de venta y los clientes tienen que optar por no contratar la cobertura si no la desean. Ejemplo: una extensión de garantía incluida en la compra de un electrodoméstico.
Asimismo, también se puede encontrar la integración ”inclusiva”, donde el cliente no puede elegir, ya que la protección del seguro está totalmente incluida en la compra o uso del producto/servicio. Los ejemplos son numerosos: plataformas de coches y empresas de alquiler de e-scooters que cubren automáticamente a los conductores/ciclistas en caso de accidentes personales; fabricantes de coches que incluyen la cobertura del seguro como parte del coste de compra del vehículo.